"Que viva el santo de mi huevo" - La historia de Carlos Ucañan y su última travesía a Australia

Una experiencia irreal según sus palabras. “No lo creía hasta que me enseñaron los pasajes y el itinerario” Primera vez fuera del Perú y directo a los escenarios de Australia.
Mientras Carlos sostiene dos periódicos australianos con su foto en la portada se remonta a su infancia y nos revela el secreto del nombre “Huevito”. Mientras lo hace, parece añorar bellos momentos y sus ojos muestran la emoción que lleva la historia.
Como se imaginan, toda la familia estaba presente y eso fue suficiente para incluir en el medio del nombre Carlos Ucañan, la palabra Huevito. Como es tradición en Huanchaco, una de las técnicas más importantes para la subsistencia de las familias es la pesca. A través de los años, la pesca pasa de padre a hijo de la misma manera que el cariño. La exigencia y la severidad vienen con la tradición y forja el carácter. Volverse pescador en esas épocas era cuestión de tiempo, tanto así como aprender a caminar.
Requiere de un maestro arquitecto de la navegación para poder construir embarcaciones capaces de igualar el talento y arrojo de los expertos navegantes de las aguas del norte del Perú. Está en la naturaleza humana temer a lo desconocido y también está en nuestra naturaleza desafiar lo desconocido. ¿Te imaginas aventurarte hacia aguas abiertas en una embarcación que construiste sin la certeza del éxito? Huevito hace una pausa para responder el celular y confirma su presencia en una exhibición de Caballitos de Totora en Órganos. Ahora su agenda es apretada.
Como en la vida no todo es trabajo, para Huevito también hay tiempo para la diversión. Hace aproximadamente unos 30 años, no había esa invasión masiva de surfistas peruanos y extranjeros que ahora repletan el ‘line up’ huanchaquero. Antes había más pescadores en Caballito que escuelas de surf según nos cuenta Carlos. Sin embargo, las nuevas generaciones de Huanchaqueros se vieron seducidas por la magia del surf y empezaron a enfocar sus esfuerzos en aprender la disciplina. El impacto del surf fue tan fuerte en Huanchaco que incluso los pescadores en Caballito de Totora no pudieron resistirse a los encantos de tan increíble práctica. “Desde ese momento, incluso hasta nosotros cogíamos la tabla, claro está, era solo para pasar el rato.” Pero es indudable la tremenda influencia que existe entre la pesca en Caballito de Totora y el surf. Huevito, sabio maestro me hace notar que el surf también le devuelve algo al Caballito de Totora.
Después de haber hecho innumerables exhibiciones y shows de surfing en Caballito de Totora, Carlos Huevito Ucañan se consolida como uno de los máximo exponentes del surf en Caballito de Totora. Hace poco menos de 4 meses, el gerente de la Reserva Mundial de Surf de Australia Andrew Mckinnon, visitó Perú en compañía de su esposa. Huevito no habla nada de inglés, asi que la comunicación fue a través de Carlos Ferrer, Representante de la Reserva Mundial de Surf aquí en Perú. De pasadita, Huevito escuchó que este señor de Australia quería llevarlo a la tierra de los canguros para poder concretar un intercambio cultural entre ambos países.
30 minutos fue lo que la WSL le dio a Carlos Huevito Ucañan para demostrar su talento sobre el Caballito de Totora, en uno de los eventos de surf más prestigiosos del mundo, el Quiksilver Pro Gold Coast. Con una sonrisa en el rostro que transmite una simpática timidez, Huevito nos cuenta su encuentro con los surfers más famosos del planeta.
Huevito estaba tan sorprendido con los mejores surfers de la WSL como ellos estaban por él. Quizás Jordy Smith, John John Florence y Adriano de Souza, lo veían a él como la persona famosa y no a la inversa. Ya en la ceremonia de premiación de la WSL, Huevito estaba de gala y listo para disfrutar el show. Sentado al costado de Greg Long, Peter Mel, Piccolo Clemente, Carlos Ferrer y Roberto Meza, Huevito estaba en el lugar que le correspondía. Carlos Ucañan recuerda entre risas y fiel a su estilo sus pensamientos cuando estaba sentado en la mesa con tales leyendas. “Yo pensé que estaba en la ceremonia del Oscar; ya estaba listo para recibir mi premio.” Me tuve que acercar a Adriano de Souza. Me encantaron sus palabras porque él es una persona de sentimientos y yo también lo soy. Adriano me agradeció mucho.
Aun con los dos periódicos en mano. Carlos agradece la entrevista y la comida ya esta lista. Después de una genial entrevista, me quedo con una gran idea de Carlos Huevito Ucañan. La mejor manera para rescatar esta tradición milenaria del Caballito de Totora, es dar a conocer nuestra cultura y promocionarla. Ya sea por pesca, por competencia o diversión, el caballito está ahí y eso es lo que importa.