La contaminación marina es un grave problema al que generalmente no le prestamos mucha atención, ya sea porque consideramos que solo afecta a las plantas y animales que habitan el mar o porque pensamos que faltan aún muchos años para que el océano termine de contaminarse por completo.
Lo cierto es que este tipo de contaminación, que se origina por medio de derrames de petróleo, escurrimiento de plaguicidas, arrojo de basura, entre otros, tiene un impacto de largo alcance perjudicando no solo el medio ambiente marino, sino también a los seres humanos en todas partes del mundo y en diversos ámbitos.
Los científicos conocen muy bien de estos temas y decidieron ir más a fondo buscando las consecuencias de la contaminación marina en el cuerpo humano, y que mejor estudio que hacerlo con los que más involucrados físicamente están con el océano: los surfers.
Para ellos los científicos se interesaron en los rectos de los surfistas, que están entre los deportes especialmente vulnerables a esta polución. Han decidido estudiar hisopos rectales de unos 300 surfers para medir el impacto en el sistema digestivo que podría alojar algunas bacterias resistentes a los antibióticos que se encuentran en el agua del mar. Es decir, buscan bacterias que viven en su vientre y que son resistentes a los antibióticos, que son muy importantes en la medicina para el tratamiento de infecciones bacterianas.
Los primeros estudios revelaron que los surfistas tragan unos 170 ml de agua durante una sesión de surf, unas diez veces más que los nadadores.
El centro Europeo para el Medio Ambiente y la Salud Humana en la Universidad de Exete, quien está detrás de esta investigación, ha anunciado que tendrá más novedades a mitad del 2017.