El surf es uno de los deportes más chéveres que existe. Aprender a deslizarse sobre las olas mientras se está rodeado de la naturaleza es una sensación que muy pocas personas viven, una experiencia única que solo los más valientes y decididos querrán repetir.
Sin embargo, para lo que recién se inician en este deporte es indispensable saber que hay ciertos principios a seguir y respetar para que todo camine bien en el agua y no seas víctima de algún local amargado que solo querrá partir tu tabla en dos.
No lancees y espera tu turno
Esta es la regla más importante que no debes olvidar. Meterte en la ola del otro es una falta de respeto total, y peor aún si se lo haces a un local. La persona que está más cerca donde rompe la ola siempre tendrá la prioridad para correrla. Si interfieres en ella no solo te estás ganando el repudio de los que están en line up, también corres el riesgo de regresar a casa con tu tabla y nariz en pedazos.
No alardeas ni tires finta
Los finterazos normalmente no suelen ser muy bien recibidos cuando se los ve acercarse al point. Son tan insoportables que con tan solo escuchar su voz karmean el line up con su mala vibra y esto puede traer consecuencias. Por eso surfea más de lo que hablas.
Escoge tablas de acuerdo a tu nivel
Correr con una tabla inadecuada de hecho te traerá problemas en el point. Una tabla que no está acorde a tu level de surfing puede ser más una molestia y una pérdida de tiempo que una mejora. En un principio, lo ideal es tener una tabla grande y flotadora para lograr más estabilidad. Con el paso del tiempo, la práctica y la experiencia, podrás adaptarte a otros shapes que definirán el estilo que finalmente buscas.
¡No te aloques por los shapes más chicos y delgados!
Conoce las playas
Antes de elegir la playa donde vas a correr, es recomendable pensar en tu nivel de experiencia. Tienes que saber reconocer si las olas sobrepasan tus habilidades o no. Es mejor evitar entrar a lugares que no sueles correr o que son para tablistas más experimentados. Así podrás evitar el peligro y el daño tanto a ti como a otros.
No te expongas a experiencias que te animen a frustrarte y dejar la tabla tirada para siempre.
Aprende a pedir disculpas
La grandeza de uno está en este tipo de cosas. ¡Reconoce!
Si terminas cortando el camino de otro surfista, embistes a otra persona con tu tabla, o simplemente rompes alguna de estas reglas por accidente, discúlpate. De la misma manera, aprende a tener paciencia con la gente nueva cuando tú ya seas alguien experimentado. Estas son situaciones de respeto y disciplina que solo entenderás si las aplicas. Conforme ganes experiencia entenderás la importancia de convivir de forma sana con otros de tu misma especia.